“Debió esperar 15 días para su remedio oncológico”
14/04/14 – Clarin
Mi marido, Gunter Bruno Bieber (DNI N° 93.746.829) padece de un cáncer de estómago y fue en su momento gracias a una carta publicada en Clarín que pudimos conseguir de PAMI las medicinas para realizar la quimioterapia indicada. Esta vez escribo porque ha surgido una nueva situación conflictiva.
Para evitar dolores, mi marido debe tomar una medicina, Metadona, cuya droga es la morfina y requiere por lo tanto dos recetas, la estándar y una especial prescripta por ley. El costo de esta droga es muy elevado por lo cual gestionamos la provisión por medio de PAMI, que la autorizó.
El oncólogo que lo atiende en el Hospital Francés le dijo que por esa única vez le daba la receta ordinaria conjuntamente con la específica correspondiente a drogas. Le indicó que en lo sucesivo debía solicitar dichas recetas a su médico de cabecera.
El jueves 20 de marzo concurrí a lo del médico de cabecera para retirar las recetas que me permitirían efectuar la compra, pero para mi sorpresa una secretaria, de muy mal modo, me informó que el doctor no las hizo y que mi marido tenía que concurrir personalmente.
El 26 de marzo, con mucha dificultad, y haciendo un esfuerzo que no debería, mi marido concurrió al citado lugar y se entrevistó con el doctor. Este le manifestó ignorar que existía una receta de ley para drogas que emite el Ministerio de Salud y le pidió a mi marido que él la consiguiera.
¿Cómo es posible que existan profesionales que manejan la salud de la gente e ignoran lo más elemental de su profesión?
Ante esta situación, el jueves 27, mi marido tuvo que concurrir al Hospital Francés y pedirle a su oncólogo la receta que, finalmente, y después de tanto tramiterío inútil, obtuvo.
Resumiendo, obtener un medicamento que es para calmar dolores llevó 15 días, yo tuve que ir dos veces al médico de cabecera y mi marido enfermo, una vez al médico de cabecera y otra vez al oncólogo La pregunta es: ¿cómo sigue esto? Y si cada vez que haya que obtener una receta deberemos pasar por esta burocracia dilatoria.
Olga Copello ocopello2001@gmail.com
Voces, reclamos y esperas de jubilados
Viendo las cartas de los jubilados me he puesto a pensar que probablemente se les pueda hacer juicios penales a los funcionarios que utilizan los fondos de la ANSeS para otros fines.
Yo no soy abogado, pero el sentido común así me lo indica.
Tendrían que juntarse algunos grupos de jubilados, con sus abogados y la participación de especialistas penales y previsionales y estudiar el tema.
Si se procesa penalmente a estos “malos tipos” por ahí se asustan y pagan lo que corresponde.
Rafael Madero rafamadero@hotmail.com.ar
Por segunda vez debo contarles que los problemas del PAMI son cada vez más graves.
Hace unos días tuve que ir a un médico especialista en Capital, y al presentarme me dijo que lamentablemente debía cobrarme $ 100 si lo visitaba por PAMI. Esto es debido al deficiente pago por sus servicios. Les abonan apenas $ 35 por paciente y tarde. Como soy ciudadano y jubilado, esto ya lo sé y pagué pues es mi salud la que tengo en riesgo. Pero esto no es lo único, sino que debo recibir una medicación oncológica y cada mes se retrasa llegando ya a los 30 días de retraso.
Quiero dejar aclarado que esta carta de protesta es sin bandería política, sino en defensa de mi salud. He pagado regularmente más de 30 años y no para esto.
Horacio Scoppa horacio.scoppa@gmail.com
Soy jubilada docente de la provincia de Buenos Aires y desde que tengo la tarjeta SUBE, con la sola presentación de mi carnet, me realizaban el descuento correspondiente.
Pero algo cambio y por supuesto sin previo aviso, ni respuestas o explicaciones coherentes.
Ahora es necesario registrarse nuevamente con el recibo mensual, DNI y la tarjeta en un centro SUBE que hará el trámite. Por supuesto, esos centros están colmados de jubilados que se enteraron por el boca a boca o por la explicación del colectivero que el sistema anterior había caducado.
Y ahí surgen las preguntas: ¿es necesario que debamos volver a hacer el trámite cuándo ya estamos acreditados con nuestro carnet jubilatorio? ¿Creen que podemos estafar con nuestra condición de jubilados? Están los jubilados en condiciones saludables para estar haciendo trámites desde tempranas horas? No alcanza ya con lo maltratados cotidianos que también debemos soportar que desconfíen de nosotros?
Graciela Tacconi grata49@hotmail.com
Me pregunto ¿dónde quedó mi risa? Sí, siento que tengo muy pocos motivos para reírme, con una pensión no contributiva de menos de $ 1.900 me tengo que manejar sola todo un mes. Me gustaría que me dieran la receta para hacerlo.
Tengo mi casa propia, pero con los ladrillos no como, y lamentablemente se deteriora día a día. Arreglarla, ¿con qué? Tengo una hija casada y dos maravillosos nietos. Al más grande siempre he podido llevarle aunque sea unas golosinas cuando lo visitaba, ahora debo privarme de ese gusto. Y ver la carita de él cuando me dice: “¿Abue, me trajiste cosas ricas? Al bebé de 7 meses no pude comprarle ni un chiche. Me pregunto si esto es justo.
Y para mí recorro y miro la ropa y todo lo lindo desde la vidriera. Tengo 63 años, vivo en Caseros y cuido abuelos o niños, pero no consigo nada de trabajo. Si alguien lee esta carta y necesita de mis servicios, bienvenido sea.
Liliana Marchesini razzaprincesa@hotmail.com
Miren el hoy, no el 2015. Amparados por un seguro sueldo a fin de mes gobernadores y legisladores prometen para el año que viene y se olvidan que nosotros vivimos el día a día. Para ellos parece que el hoy no existe. Pese a aprobar la ley de leyes, el Presupuesto nacional 2014, enviado por la Presidenta, el primer mes, enero, llegó una mega devaluación que no figuraba en línea alguna de lo votado, alterando la vida de todo el país. Los jubilados no hacemos huelga, pero estamos vivos.
Patricio Avellaneda patoave48@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario