lunes, 14 de mayo de 2012

Un Jubilado va desapareciendo de a poco

Opinión
Cartas de lectores

Un jubilado va desapareciendo de a poco”

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12/05/12 - 00:16

Cuando sopló el viento fuerte, muchos nidos fueron destruidos y cayeron las crías de pájaros. Uno lo tuve en mis manos, hasta que escribió una parte de mi historia. Mientras estaba libre, era corrido por depredadores naturales. Se le dio protección, cobijo y abrigo. Al día siguiente, llamaba a los suyos, hasta que dejó de hacerlo.
Lentamente fue muriendo, sin aspavientos como los humanos, sino en forma animal. Sin quejas ni lamentos. Murió en mis manos, cuando levantó su alita, dio una gran inspiración y … partió. Su corazoncito dejó de latir, pero me entregó algo muy importante: una enseñanza.
Tuve que hacer una comparación: cuando un jubilado desaparece, lo hace lentamente, resignado a su suerte. Entonces nos surge una furia, una rebelión y se maldice a todos los funcionarios de la ANSeS, que para ellos son sólo un número. Sólo se toma en consideración lo que la administración se ahorrará desde ese momento en adelante.
Y se siente rabia hacia los políticos que han estafado a los ciudadanos, expropiando los fondos privados, solamente para ajustar sus presupuestos. Todos son seres humanos, menos ellos. Ni siquiera valen para odiarlos, son unas pobres personas.
Por eso a ese pequeño ser, que murió en mis manos, lo respeto y unas lágrimas se me cayeron por él. No fueron de rabia y odio, sino porque no pudo vivir o haberse librado de pasar por esta triste vida igual a la que tienen los jubilados. Aquí mi homenaje hacia todos los pequeños animales que han desaparecido.

Juan R. Bell
belljuanroberto@yahoo.com.ar

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