domingo, 1 de septiembre de 2013

“¿Ahora el PAMI adónde nos mandará?”

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30/08/13 – Clarin

“¿Ahora el PAMI adónde nos mandará?”

Mi esposo, Héctor F. Parrado, hace 10 meses que no camina, producto de haber sufrido el 23 de octubre de 2012 un infarto de cadera con compromiso vascular. Tuvo tres meses de reposo absoluto, fue operado en febrero, tres meses más de reposo. En mayo se le produjo un infarto en la otra cadera y fue operado en julio. La primer intervención quirúrgica fue un éxito, no así la segunda, tras la cual se desmoronó todo lo hecho anteriormente.
Ahora nos enteramos que el PAMI no renovó su convenio con el Sanatorio Colegiales desde el 23 de febrero. En esa institución afirman que se le adeuda mucho dinero. ¿Por qué tomaron esta decisión? ¿Será que la plata que es legítimamente de la salud de los jubilados se usa para otros fines?
Nosotros fuimos atendidos de la mejor manera por el doctor Edmundo Feiman, excelente profesional y mejor ser humano. Igual fue la forma en que nos trató todo el personal del sanatorio. Tenemos entendido que esta institución era considerada como el mejor establecimiento para la atención de los jubilados, pregunto: ¿ahora adónde nos mandarán? Quizás a un hospital público donde tenés que esperar tres meses para un turno.
Hoy mi esposo (ben. N°15-0-4332443-0-1) tiene que operarse nuevamente de la cadera, teniendo compromiso vascular importante, el sanatorio sin darle el alta nos niega todo tipo de atención.
Nosotros somos de los jubilados que trabajamos y aportamos toda la vida, nadie nos otorgo una jubilación de regalo. Es lamentable la falta de respeto que tienen hacia nosotros. En caso de que a mi esposo le pase algo, hago responsable al PAMI por abandono de persona.
Alicia Terzano
alicia.parrado@hotmail.com

En este Link comentarios de los lectores: http://www.clarin.com/opinion/Ahora-PAMI-adonde-mandara_0_984501650.html

Voces, reclamos y esperas de jubilados
Según los últimos cálculos, 23 años es lo que tardará la ANSeS en pagar los juicios de los jubilados. Por fin han encontrado la solución de punto final para los 600 mil juicios: es, sin prisa y sin pausa, la muerte de los jubilados. Lisa y llanamente. En su mayoría, debido a los grandes deteriores físicos que padecen, día a día, se van muriendo. Lamentablemente, el dulce de leche de todos los gobiernos han sido los fondos de los jubilados.
Es evidente que sí se puede pagar el 82%, pero lo que no se puede permitir es el saqueo por parte del Estado de los fondos de los jubilados. Nunca han podido quebrar al país ni a la caja de jubilados, a pesar de todos los saqueos que han ocurrido hasta la fecha.
Marcos Attias
casasytranqueras@yahoo.com.ar
La Presidenta ha instado a su militancia a golpear las puertas casa por casa para convencer a la gente de las bondades del modelo. Dudo mucho que lo pueda lograr porque: ¿cómo puede convencer a un jubilado, al cual le negó la posibilidad de una mejor forma de vida al vetar la ley del 82% móvil?
¿Qué argumentos podrá esgrimir para justificar la utilización de los recursos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad del Sistema Previsional para fines muy alejados de la causa que originó su constitución? ¿Cómo le explicará al jubilado las razones de las intencionales postergaciones del pago de las sentencias judiciales favorables por demandas de ajuste de haberes? ¿Cree que encontrará clima propicio en la casa de los jubilados después de haberlos calificado de buitres y caranchos por reclamar aquello que por ley les corresponde?
En función de esas “maldades” del modelo, ¿de cuáles bondades lo podrían convencer? Allí tiene la señora Presidenta la causa del voto desfavorable de la gente y del rechazo por parte de los jubilados de su gestión.
Víctor La Pietra
lapietrav-@hotmail.com
En el reportaje de Clarín a Sergio Massa publicado el 28 de julio, ante una pregunta del periodista, el jefe del Frente Renovador contestó que dentro de su propuesta estaba “la inclusión de los jubilados”. Sinceramente no sé a qué se refiere con esa frase y su ambigüedad hace recordar a las palabras de Beatriz Sarlo al respecto cuando manifestó “habla como un demagogo, ya que dice lo que la gente quiere escuchar ...”.
Pero volviendo a la “inclusión de los jubilados” me pregunto: ¿para qué o dónde, ya que desde 2002 a la fecha la mitad de ese tiempo la pasó al frente de la ANSeS y, qué hizo? Mantuvo la lógica de la política darwiniana sobre evolución de las especies y por lo tanto cobra el que logra sobrevivir. Bajo su actuación en esa entidad pagó a los jubilados las sentencias, pero en algunos casos se les abonó de menos y provocó nueva demanda en la Justicia. También en su gestión se produjo el desequilibrio de haberes que llevó a la Corte al famoso caso Badaro, y en mi caso otro expediente judicial (expediente Nº 48064/2010).
Por esto y mucho más debería ser más explícito en su propuesta de campaña, como por ejemplo: ¿qué piensa proponer para bajar la litigiosidad actual, o qué hacer con las sentencias. ¿Puede un jubilado cobrar antes de que muera, etc.? Estas preguntas son válidas también para los otros candidatos, ya que nada dicen y cuando algo manifiestan, sólo generalizan.
Gabriel Di Benedetto
gdiben07@yahoo.com.ar
La tarjeta implementada por la ANSeS para percibir las jubilaciones y pensiones tiene cosas negativas que es necesario solucionar cuanto antes. No se entiende muy bien el porqué de su obligatoriedad. Hay que poner una clave para acceder a los cajeros automáticos y eso para muchos ancianos es difícil entender.
¿Quién les explica a los mayores de 80 años lo que tienen que hacer, que se tienen que acordar de ella? Todas esas cuestiones son un dolor de cabeza mayúsculo, porque en definitiva quienes lo diagramaron no pensaron en estas situaciones puntuales.
Además, el cajero limita a sólo $ 1.000 las extracciones, como en el caso del Banco Nación, cuando lo que quiere el jubilado es cobrar completo el haber porque tiene obligaciones que cumplir, o sea vivir, lo que encierra un grave perjuicio. Sin olvidar que los cajeros muchas veces no funcionan o carecen de dinero.
Además, aunque no tiene costo alguno, se obliga a dejar dinero en la cuenta para no cerrarla. Frente a este cúmulo de desaciertos, la ANSeS debe preocuparse en dejar de complicar la vida a los mayores, que sólo quieren cobrar lo suyo.
Mario Parafati
malepara@yahoo.com.ar

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