martes, 3 de septiembre de 2013

CARTA QUE ENTREGO el dr.EUGENIO SEMINO CUANDO ENTREVISTO AL PAPA

Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 20 de agosto de 2013.-
Estimado Francisco:
Ante todo, , vaya mi sentido agradecimiento por la oportunidad de poder
conversar con Ud teniendo en cuenta lo grave y vasto del conjunto de los problemas que le toca considerar.
También, en lo personal, me es necesario transmitirle la enorme emoción que me embargó tras conocer su designación como máximo referente de la Iglesia Católica, aclarándole, que son pocas las ocasiones, en las cuales suelen coincidir, los objetivos de vida de una persona con las formas de desempeño personal y las decisiones asumidas en lo cotidiano.
En honor a lo acotado del tiempo, que de seguro dispone, se me ha ocurrido dejarle un pequeño recordatorio de las ideas centrales que deseo compartir con Ud.
1) Nuestra población mayor se encuentra expuesta a una vectorización mediática y sistemática referida a popularizar ideas y representaciones centradas en situaciones de inseguridad individual , en especial de violencia urbana.
Frente a esto quiero decirle ; desde nuestro acotado espacio de trabajo
venimos proponiendo y auspiciando el paradigma de la SEGURIDAD SOCIAL o HUMANA . Dicha idea fuerza, no cabalga sobre representacio-nes de desconfianza y distancia del prójimo, sino sobre la búsqueda de consensos democráticos y colectivos a fin de suturar las agudas desigualdades sociales
abiertas en nuestra comunidad.

Desde nuestra perspectiva las verdaderas soluciones de los problemas de los adultos mayores deben tomar por norte indiscutido el concepto ampliado de SEGURIDAD SOCIAL, que incluye las temáticas de salud, educación, trabajo y previsión social de los argentinos.
Pensamos que de diagnósticos elementales emergen pseudo-soluciones
sectoriales, las que de última van a implicar efectos paradojales para con lo que se pretende resolver.

Estos componentes son los verdaderos garantes de una democracia sustentable con beneficios ciertos y extendidos al total de la
población.

En síntesis el desarrollo de una sociedad no solo se mide por el
incremento del PBI o por la producción de bienes y servicios, también y
fundamentalmente por la capacidad que la misma tenga para resolver los
problemas asociados con ese mismo desarrollo que tiende a generar
paradojalmente : excluídos y destituídos de sus beneficios


2) La compleja problemática de los adultos mayores tiene perfiles multifacéticos,
pero dentro de esas circunstancias aspiro resaltar en esta oportunidad, un aspecto tradicionalmente invisibilizado o como dicen algunos, “no agendado por los decisores”.

La llamada DEPENDENCIA DE LOS ADULTOS MAYORES, entendida como el conjunto de las dificultades (de distintos grados) que tiene un sector importante de los mismos, para lo que venía siendo el desempeño habitual de sus actividades cotidianas.

Las mediciones internacionales, en la materia, nos están alertando sobre un 26 % del total de los mayores con distintas restricciones.

A este fenómeno , desde hace unos

esempeño habitual de sus actividades cotidianas. Las mediciones
internacionales, en la materia, nos están alertando sobre un 26 % del total de los mayores con distintas restricciones.

A este fenómeno , desde hace unos años se viene definiendo como un auténtico TSUNAMI SOCIAL Y EPIDEMIOLÖGICO…

A modo de ejemplo en las recientes inundaciones del mes de abril en la Ciudad de La Plata, de las primeras 52 víctimas fatales informadas oficialmente, el 75 % correspondieron a personas mayores, a
quienes las aguas los encontraron solos, en situación de pobreza y
dependientes.

Lo grave y lacerante de esta problemática poblacional es que los
únicos “diques” que se construyen son hipócritas discursos apelando a la responsabilidades familiares sobre la atención y cuidado de sus ancianos,particularmente dirigidos a las mujeres cuidadoras (esposas, hijas, nueras,nietas o sobrinas), mientras que a la hora de los apoyos y concursos solo se detectan ausencias y vacíos…


3) La discusión sobre los montos previsionales de los jubilados, en su actual estructura o sobre la que potencialmente serían acreedores los interesados,pone en evidencia dos grandes sesgos.

Por un lado, el problema, suele quedar circunscripto a criterios numeral contables , ignorando la complejidad del tema y por otro lado en la mayoría de los análisis se acepta el criterio implícito de la PRECONFIGU-RACIÓN DE LA VEJEZ COMO POBREZA.

Las mediciones en la materia son cómplices como partícipes necesarios de esta última mirada.

Cuesta mucho incorporar a esta conceptualización la idea sobre
la necesidad de un cambio integral en el Sistema de Previsión Social, el que desde hace ya un tiempo dejó de estructurarse según supuestos
bismarkianos que lo hacían dependiente absoluto de los ingresos provenientes del trabajo.

También en este campo nos encargamos de advertir sobre la
invisibilización del problema de la estructura del financiamiento actual del
sistema , que ha determinado el crecimiento exponencial de las jubilaciones mínimas (hoy superan el 70 % del total) , la depresión de la estructura piramidal de la escala de los haberes previsionales y el cambio progresivo y cultural del concepto de jubilación por el de subsidio para la vejez.
Esta breve descripción sobre algunos de los problemas que considero críticos cae en saco roto si la búsqueda se reduce a identificar un interlocutor “privilegiado” que contemple y de alguna manera sostenga nuestra queja…
Por el contrario me dirijo a la principal Autoridad de la Iglesia Católica , porque la situación de actual desagregación social de nuestro país, no deja lugar para que ninguno de los sectores sociales y/o políticos del mismo puedan agendar y llevar a la práctica la necesaria atención de nuestros mayores.
En la actualidad en la República Argentina, cada actor “atiende su juego” y resulta doloroso el reconocerlo…
Por estas razones, me he decidido a ocasionar esta molestia a su Santidad, para señalarle que en su persona coinciden expectativas de vastos sectores sociales , tan necesarias para los tiempos que corren en la Argentina.
Francisco Ud. cuenta con la legitimidad suficiente para auspiciar una INCIATIVA PARA EL DIÁLOGO ENTRE LOS ARGENTINOS, orientada a convocar , escuchar y traducir a un parlamento común las estimaciones, diagnósticos y propuestas de diferentes organizaciones y en general actores del quehacer nacional sobre los problemas actuales y a futuro que conlleva el envejecimiento en nuestro país.
A dichos efectos y si considera viable esta Iniciativa, nuestro equipo se pone a disposición de lo que juzgue pertinente y con la metodología que Ud decida.
Si al respecto si opta por otras acciones en esta temática no dude en convocarnos porque estaremos siempre a su disposición tras estas causas en favor de la vida.
La ultima reflexión que quiero transmitirle, que en ocasiones resulta muy costoso y abrumador el intento “peregrino” de ser portavoz de un conjunto enorme de voces perdidas de adultos mayores, quienes no cuentan con el tiempo de vida necesario, las oportunidades ni tampoco los instrumentos para hacerse oír…
Para Ud. un fuerte y sentido abrazo.-
Dr. Eugenio Luis Semino
Defensor del Pueblo de la Tercera Edad

No hay comentarios: